Como os comenté la semana pasada (o la anterior, que no sé en qué día vivo), ya he empezado a pensar cositas de cara a la Navidad, que luego, si no, me pilla el toro como siempre.
Hoy os traigo un postre que, sin ser un postre típico de Navidad, en cuanto lo vi pensé que estaría bien para después de una de las comilonas que tendremos. Es bastante ligero, lo cual agradeceremos después de los platacos que nos meteremos entre pecho y espalda.
Además, estéticamente, con sus colores rojo y blanco (o clarito) me recordó a la Navidad.
Es un Milhojas con crema de limón y frambuesas.
La receta la vi de casualidad el otro día en un programa de cocina de Lorraine Pascale y me dije: “Uy que fácil, esto hay que hacerlo para el blog!”
Ya sabéis que el hojaldre lo podéis hacer en casa pero, como ya tendréis bastante que cocinar esos días, en este caso usaremos refrigerado.
Ah! Y por cierto, aunque yo os lo sugiera para Navidad (porque me pareció chulo para esas fechas), obviamente no tenéis que esperar hasta entonces para probar a hacerlo. Porque, además, se hace súper rápido.
INGREDIENTES:
- 1 placa de hojaldre rectangular
- 150 ml de nata de montar
- 75 g de azúcar glacé para la crema y un poco más para espolvorear
- 1 cucharadita de aroma de vainilla
- Zumo de 1 limón
- Frambuesas
Ponemos los rectángulos en la bandeja del horno (con papel de horno) y espolvoreamos azúcar glacé por encima. Lo metemos 5 minutos.
Sacamos y volvemos a espolvorear un poco de azúcar glacé y volvemos a meterlo hasta que el hojaldre esté doradito. Yo lo habré tenido unos 10-12 minutos la segunda vez.
Cuando estén, sacamos y dejamos enfriar.
Para la crema, ponemos la nata a montar. Cuando esté casi, echamos la mitad del azúcar glacé previamente tamizado. Mezclamos un poco y echamos el resto. Seguimos montando y, mientras tanto, podemos echar la vainilla y el zumo.
Cuando esté la nata montada, la metemos en una manga pastelera con una boquilla redonda.
Para decorar, ponemos un hojaldre, echamos con la manga 4-5 “pegotitos” de crema (el número un poco al gusto) y entre ellos ponemos las frambuesas. Y encima, otra plaquita de hojaldre.
El hojaldre se mueve bastante así que está bien poner también un poquito de crema por debajo del hojaldre para que se quede un poco pegado al plato (o a donde lo estemos haciendo).
Espero que os haya gustado!!!
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Un beso,
Ane
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